20.11.08

giro constitucional

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No nos vamos a cansar de decirlo porque llevamos grabado a fuego el sabor de la libertad: en España no la hay y por eso es necesario ir a la raíz del sistema y cambiarlo. Don Luis pone el dedo en la llaga, una vez más:


"Un cambio, pero de verdad.

Estoy harto de pagar un canon a los estafadores oficiales, culturetas de salón. Estoy harto de lobbys con acceso directo al poder, estoy harto de las palabras hueras con tono progre salvaplanetas, estoy harto de que se den lecciones de moralidad desde el gobierno como si fueran una iglesia laica, estoy harto de la burocracia de diecisiete administraciones paralelas, policías autonómicas, televisiones públicas ruinosas y manipuladoras, harto de ministerios inútiles, de consejerías más inútiles y de políticos profesionales que engordan a la sombra de la cuota de turno, harto de déspotas de pueblo que son elegidos en las verbenas, harto de subidas de impuestos directos e indirectos que se pierden de mano en mano, harto de que los parlamentarios ni siquiera ocupen su sillón aunque sea a mandar mensajitos de móvil, harto de que Solbes se duerma contando parados, harto de sindicatos que sólo defienden sus privilegios, harto de empresarios pelotas en el palco del Madrid, harto de banqueros que piden dinero y luego dicen no necesitarlo para no quedar retratados, harto de que no perdonen un crédito a los mismos que esquilman a través del gobierno, harto de un país que es una enorme fosa común todo él, harto de jueces que entienden la justicia según la conveniencia del momento político, puestos a dedo y sumisos como sadomasoquistas de fin de semana, harto de la actitud o aptitud sospechosa de unos servicios de inteligencia en momentos puntuales de este país y con la constante de ser incapaces de acabar con una zafia banda de pistoleros durante 40 años, harto de la gente que confía más en el azar de la lotería que en la posibilidad de cambiar su vida a través de la acción y la reflexión, harto de los medios de comunicación que optan por provocar la noticia que no ha ocurrido en vez de atenerse a lo ocurrido, harto de la intromisión en la vida privada de la gente, harto de lo que llaman Estado (cuando quieren decir ejecutivo) que nos va fagocitando como si fuera un agujero negro, harto de las listas cerradas, de la apariencia de que se pegan entre ellos, harto de la gente que espera agazapada con la esperanza de que no le vean, harto de que cada uno vaya a lo suyo permitiendo que otros le construyan el futuro mientras se hacen la ilusíón de que es un futuro elegido.

Pido un cambio en la Constitución. Sentarse a redactar una carta magna que acabe con los abusos de estos años, con la chulería de las minorías, con la indefinición como sistema. Si el resultado de la guerra civil ya no vale, tampoco vale esta constitución del 78. Fuera con los reinos de taifas, que los mantenga su puta madre con himno y bandera. Quiero gestores serios, que recojan los impuestos justos; ni uno más, y los repartan con inteligencia siguiendo un criterio de eficacia y necesidad, y no como ahora, atendiendo al interés político de tal o cual fulano. No falla el capitalismo, falla la política. Con el bálsamo de la ideología nos la meten doblada, de izquierda y derecha: K.O. Repito, no quiero lecciones desde el poder. El pensamiento, la cultura, la reflexión ética debe partir de la sociedad, de los individuos y de su formación. Los valores de abajo a arriba. Los gobernantes a gestionar, sometidos a mecanismos de control independientes. Quiero votar, pero no por zapatero o rajoy, quiero votar por los asuntos importantes que atañen a esta sociedad en la que vivo. Quiero una urna en mi casa. Tenemos que meterle mano a esa constitución y pronto, antes de que se nos caiga hecha pedazos y acabemos por declararnos en rebeldía cívica hartos de mantener putos (hombres públicos) democráticamente elegidos.


Suma y Sigue."





croquis chapucero: n a c o (quién si no)


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